Tiempo de lectura: 2 minutos
Uno de los aspectos más importantes en el conocimiento del CBD es entender su metabolismo. Del metabolismo depende la biodisponibilidad, el efecto terapéutico y también las posibles interacciones con medicamentos u otros fitoterapéuticos que un producto puede tener.
El CBD puede ser administrado por inhalación (fumado o vapeado), vía oral (aceites o cápsulas) o por vía transdérmica (a través de parches o cremas) (1). Una vez absorbido la farmacocinética varía en función de la persona, la ruta de administración, la dosis y si el uso es agudo o crónico. Lo estudios muestran que la vía inhalada genera una mejor absorción del cannabinoide, asociado también a una mejor biodisponibilidad y una mayor rapidez en el inicio del mecanismo de acción (2).
Las ingestas orales cuentan en su metabolización con el efecto de primer paso que consiste en la transición del producto desde el intestino al hígado y su metabolización en este antes de estar disponible para actuar, lo cual reduce parcialmente la biodisponibilidad final del producto (3). Una vez consumido, el pico máximo en plasma ocurre entre 2 y 5 horas después (4) en función de los condicionantes individuales en el metabolismo de la sustancia. La absorción oral del CBD se ve favorecida cuando la ingesta se realiza junto con comidas altas en grasa, aumentando hasta en 5 veces la concentración en comparación de cuando se ingiere en ayunas. Mientras que ingestas asociadas a comidas bajas en grasas y calorías aumentan la concentración 4 veces (5), de ahí que la mayoría de extractos para el consumo oral vengan diluidos en una base de aceite.
Una vez absorbido a nivel intestinal el CBD es dirigido al hígado a través de la vena porta, donde es metabolizado a través de los procesos de fase I y II hepática. En la fase I requiere de los procesos de hidroxilación, oxidación y conjugación mientras que en la fase II pasa por la glucoronidación. De este modo el CBD es metabolizado a 7-hydroxy-cannabidiol que es convertido en el principal metabolito circulante, el 7-carboxy-cannabidiol. La lipofilia de este metabolito hace que tenga mayor afinidad de acumulación en los tejidos grasos (6).
La vida media del CBD depende de la vía de administración. Las vías orales tienen una vida media más larga que el resto, variando según el tipo de producto ingerido, entre 58 y 68,4 horas según dos diferentes estudios realizados con diferentes productos (7,8). La vía inhalada tiene una vida media de 31 horas mientras que la intravenosa es de 24 horas (9) siendo la excreción final del CBD fundamentalmente a través de las heces (8). Curiosamente, en niños la vida media de los extractos orales de CBD se sitúa en una media 6.2 horas (10).
Uno de los pasos más relevantes en la metabolización es su paso por el hígado. En este proceso es metabolizado por varias enzimas presentes en el citocromo P450 generando aproximadamente 40 metabolitos diferentes (11). En el hígado, encontramos 7 enzimas con capacidad de metabolización del CBD en la fase I CYP1A1, CYP1A2, CYP2C9, CYP2C19, CYP2D6, CYP3A4 y CYP3A5. Mientras que en la fase II de metabolización encontramos dos enzimas que ejecutan la glucoronidación UGT1A9 Y UGT2B7 (12). La importancia de esta interacción entre el CBD y los diferentes CYP hepáticos es el efecto que este pueda tener sobre ellos afectando a su funcionamiento, lo cual estará directamente relacionado con posibles consecuencias en el metabolismo de otros productos, por ejemplo, fármacos. He aquí la clave de las interacciones entre ellos, cuestión que dejamos para un siguiente artículo.
Referencias
1. Bridgeman, M. B., & Abazia, D. T. (2017). Medicinal cannabis: history, pharmacology, and implications for the acute care setting. Pharmacy and therapeutics, 42(3), 180.
2. Bardhi, K., Coates, S., Watson, C. J., & Lazarus, P. (2022). Cannabinoids and drug metabolizing enzymes: Potential for drug-drug interactions and implications for drug safety and efficacy. Expert Review of Clinical Pharmacology, 15(12), 1443-1460.
3. Devinsky, O., Kraft, K., Rusch, L., Fein, M., & Leone-Bay, A. (2021). Improved bioavailability with dry powder cannabidiol inhalation: A phase 1 clinical study. Journal of pharmaceutical sciences, 110(12), 3946-3952.
4. Bergeria, C. L., Spindle, T. R., Cone, E. J., Sholler, D., Goffi, E., Mitchell, J. M., … & Vandrey, R. (2022). Pharmacokinetic profile of∆ 9-tetrahydrocannabinol, cannabidiol and metabolites in blood following vaporization and oral ingestion of cannabidiol products. Journal of analytical toxicology, 46(6), 583-591.
5. Crockett, J., Critchley, D., Tayo, B., Berwaerts, J., & Morrison, G. (2020). A phase 1, randomized, pharmacokinetic trial of the effect of different meal compositions, whole milk, and alcohol on cannabidiol exposure and safety in healthy subjects. Epilepsia, 61(2), 267-277.
6. Leighty, E. G., Fentiman Jr, A. F., & Foltz, R. L. (1976). Long-retained metabolites of delta9-and delta8-tetrahydrocannabinols identified as novel fatty acid conjugates. Research communications in chemical pathology and pharmacology, 14(1), 13-28.
7. Hosseini, A., McLachlan, A. J., & Lickliter, J. D. (2021). A phase I trial of the safety, tolerability and pharmacokinetics of cannabidiol administered as single‐dose oil solution and single and multiple doses of a sublingual wafer in healthy volunteers. British journal of clinical pharmacology, 87(4), 2070-2077.
8. https ://www.epidiolex.com/sites/default/files/pdfs/EPIDIOLEX_Full_Prescribing_Information_04_16_2020.pdf
9. Ohlsson, A., Lindgren, J. E., Andersson, S., Agurell, S., Gillespie, H., & Hollister, L. E. (1986). Single‐dose kinetics of deuterium‐labelled cannabidiol in man after smoking and intravenous administration. Biomedical & environmental mass spectrometry, 13(2), 77-83.
10. Wang, G. S., Bourne, D. W., Klawitter, J., Sempio, C., Chapman, K., Knupp, K., … & Bajaj, L. (2020). Disposition of oral cannabidiol-rich cannabis extracts in children with epilepsy. Clinical Pharmacokinetics, 59, 1005-1012.
11. Harvey, D. J., & Mechoulam, R. (1990). Metabolites of cannabidiol identified in human urine. Xenobiotica, 20(3), 303-320.
12. Jiang, R., Yamaori, S., Takeda, S., Yamamoto, I., & Watanabe, K. (2011). Identification of cytochrome P450 enzymes responsible for metabolism of cannabidiol by human liver microsomes. Life sciences, 89(5-6), 165-170.